FORO ASUNTOS DE VIDA: La paternidad y la santidad de la vida humana

25 de mayo de 2012

Kimberly Baker

La próxima celebración del Día del Padre es un buen momento para examinar la ironía de que en nuestra cultura actual, raramente se menciona la paternidad. Y cuando se menciona, los padres son objeto de burla o se presentan negativamente. Algunas películas e historias le restan importancia al papel del padre en la vida de un niño, pero al mismo tiempo presentan al niño como si sufriera por la incapacidad del padre de desempeñar su papel.

En realidad, la nobleza y la importancia de la paternidad siguen siendo un testimonio poderoso en la vida de aquellos que han tenido la oportunidad de crecer con un padre presente y atento. Y hay, por supuesto, historias profundas y testimonios para hacer frente a la actitud derrotista de la cultura hacia la paternidad.

Junto con el papel único y enriquecedor de la madre, el padre también tiene un papel vital que desempeñar en la protección de la santidad de la vida humana nueva y en la formación de la generación más joven. La función especial del padre en la protección y defensa de la madre y el niño ayudan a garantizar la estabilidad y el desarrollo saludable de toda la familia.

Juan Pablo II escribió sobre la importancia de la paternidad en su Exhortación Apostólica Familiaris Consortio:

El hombre está llamado a garantizar el desarrollo unitario de todos los miembros de la familia… mediante una generosa responsabilidad por la vida concebida junto al corazón de la madre, por un compromiso educativo más solícito y compartido con la propia esposa, un trabajo que no disgregue nunca la familia, sino que la promueva en su cohesión y estabilidad, un testimonio de vida cristiana adulta, que introduzca más eficazmente a los hijos en la experiencia viva de Cristo y de la Iglesia. (n. 25)

 

La dedicación y el compromiso de los esposos y padres a sus familias deben ser afirmados y apoyados si queremos construir una cultura de la vida. Junio es también el mes del Sagrado Corazón de Jesús. Qué apropiado es el ejemplo del amor sacrificial de Cristo en el que recordamos la forma en que dio su vida por su Esposa, la Iglesia. La medida en que abre su corazón para la humanidad muestra el último modelo de un hombre de compasión y de la fuerza tranquila. Podemos ver ejemplos concretos de esto en el Evangelio, en la forma en que trató a la mujer samaritana con dignidad y en la forma en que dio la bienvenida a los niños que querían acercarse a él.

Cuando un bebé está creciendo en el vientre, el primer órgano vital que se desarrolla es el corazón, que comienza a latir en el día 21. ¿Qué dice esto sobre la persona? Es casi como si Dios honrara la capacidad de amar al dar la supremacía al corazón, incluso en el desarrollo físico del ser humano. Si bien el padre no está físicamente conectado a la nueva vida en desarrollo de la misma manera que la madre, no tiene por qué ser excluido de este hermoso misterio. Durante este mes de junio, todos los corazones pueden mirar hacia el Sagrado Corazón de Jesús como una fuente de inspiración, y que todos los esposos y padres se renueven en su llamado a construir la cultura de la vida, comenzando con su familia.

 


Kimberly Baker es coordinadora de programas y proyectos para el Secretariado de Actividades Pro-Vida de la Conferencia de Obispos Católicos de los Estados Unidos. Para más información sobre las actividades pro vida de los obispos, visite: www.usccb.org/prolife.